NOSOTROS TAMBIÉN ESTAMOS AQUÍ.
Somos las personas con Parálisis Cerebral: Una
lesión en nuestro cerebro de carácter permanente y que afecta a nuestro sistema
nervioso limitando nuestra vida en todos los aspectos, también formamos parte
de este mundo. Es cierto que muchos no caminamos, tenemos problemas para
hablar, comer o mantener el tronco, algunos padecemos problemas cognitivos,
pero todos tenemos algo en común y es el enorme deseo ser aceptados plenamente
en la sociedad.
Durante
los últimos años el concepto social de las personas con Parálisis Cerebral ha
cambiado mucho, hemos pasado de ser unos “raritos con dificultades” a los que
no sabían dónde encajarnos, a contar con centros especializados donde trabajar
y desarrollar nuestras discapacidades. Algunos incluso se han atrevido a
integrarse en el mundo laboral o a vivir de manera independiente. Algo que
puede ser viable o no, dependiendo en gran medida del grado de afectación de
cada persona. ¿Pero, qué persona carece de limitaciones? , ¿A caso todo el
mundo puede pintar un Guernica o pilotar un Helicóptero Apache?, no. Todos tenemos
capacidades y discapacidades, todos podemos “ser” y “hacer”, y a todos nos
sobrepasan muchas cosas…
Solo
queremos que se nos acepte como parte del variado paisaje de la vida y que la
sociedad nos ponga unas adaptaciones, “necesarias”, para que podamos
desarrollarnos en plenitud. Tener las mismas oportunidades que los demás para
formarnos y desarrollarnos como personas mientras caminamos hacia una inclusión
plena.
No
es un camino fácil. En los últimos tiempos hemos trabajado duro para conocer y
hacer respetar nuestros “Derechos” como personas de a pie. Queremos que se nos
trate con dignidad, respetando y valorando nuestras capacidades y tratándonos
según nuestra edad. Que no sean siempre las familias y profesionales los que
tomen las grandes decisiones, muchas veces sin consultarnos, sabiendo que
nosotros, para bien o para mal, vamos a ser los que disfrutemos o suframos las
consecuencias de dichas decisiones, terminando de esa forma con la epidemia del
infantilismo permanente.
Y
como, reclamar también nuestro derecho a la salud, donde quiero incluir el
poder disfrutar de nuestra sexualidad con dignidad y plenitud. Reclamar el
Derecho a poder contar con los apoyos necesarios para convivir en libertad con
la persona que amamos sin que ello, nos cree problemas familiares. Pues creo
que en nuestras vidas, como en todas las demás, hay un sitio único e
intransferible para cada una de las personas que nos rodean y que ampliar
horizontes no implica excluir a nadie.
Me
gustaría que este pequeño texto fuese un pequeño paso para el ser humano hacia
esa plena inclusión que tanto anhelamos. Ello, hará que este 6 de Octubre, así
como los que vengan en el futuro sean un verdadero ejemplo de integración
plena, en el que todos los ciudadanos con parálisis cerebral podamos celebrar
nuestra vida con alegría y optimismo.
¿A
caso es tanto pedir?
MIRANDO
FIJAMENTE AL HORIZONTE
José
Sergio González Rodríguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario